
Las autoridades de Hong Kong llevan un estricto control de los visados para controlar la inmigración que llega a la región china.
Dentro de la normativa que regula los visados, se establece que la población que sea enviada por su empresa a trabajar en alguna filial de la región podrá llevarse a su familia.
Como el matrimonio igualitario no está aprobado en la región, las parejas homosexuales no habían podido estar juntas si la empresa en la que trabaja alguno de los miembros de la pareja le ha enviado a Hong Kong, puesto que solo los familiares del mismo pueden acompañarle.
Pese a ello, las autoridades de la región han permitido que los dos miembros de una pareja homosexual puedan residir en la región, emitiendo el correspondiente visado de forma excepcional.
Grace Shie, un abogado chino, ha defendido la medida ya que "si puedes presentar evidencias sólidas de que usted tiene una relación especial de largo plazo, y que continuará, entonces aumentan las posibilidades de que sean aprobados".
Fuente: Universo Gay