
Los hechos se produjeron a última hora de la tarde del domingo 31 de julio, cuando uno de los responsables de la piscina, al ver que los chicos se estaban besando mientras se bañaban, los increpó y les exhortó a que “si no tenían vergüenza y querían seguir montando el espectáculo, se fueran a la calle”, según la denuncia. El individuo se dirigió además a la madre de uno de los chicos, a la que reprochó que “consintiera semejante espectáculo”. La madre denunció lo ocurrido ante la Guardia Civil, tras no poder presentar una queja en el libro de reclamaciones, del que los propietarios afirmaron “no disponer”.
Familias por la Diversidad ha mostrado su apoyo público a esta familia humillada y maltratada, según ha señalado su presidenta a nivel andaluz, Isabel Martínez, que ha insistido en la importancia de la sensibilización contra la homofobia en los pequeños municipios. “Aún queda mucho trabajo por hacer para convencer a algunos de que las muestras de afecto entre dos personas que se aman son igual de hermosas y saludables tanto en las parejas homosexuales como en las heterosexuales”, ha afirmado.
COLEGA-Jaén ha solicitado además al Ayuntamiento de Baeza y a la Junta de Andalucía la revisión de la licencia de apertura de esta piscina privada de uso público. Según su presidente, Gonzalo Serrano, la “denegación en la prestación de un servicio público por motivos discriminatorios es un delito recogido en el artículo 512 del Código Penal”.
Fuente: Dos Manzanas