La feria Folsom Street que se lleva a cabo todos los años en San Francisco, autoproclamada como "la madre de todos los eventos de temática leather" siempre logra atraer la atención de las fuerzas anti-gays. Pero este año el nivel de atención ha ascendido demasiado ya que algunos grupos utilizarán el evento para promover la aprobación de la Proposition 8, la ley que intenta prohibir el matrimonio gay en California y para atacar a algunos de los defensores de los derechos de los gays como la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi y el alcalde de San Francisco, Gavin Newsom. El grupo llamado Americans for Truth, "una organización nacional dedicada a exponer y contrarrestar la propaganda de los activistas homosexuales", llevó a cabo una conferencia de prensa el pasado día sabado en el ayuntamiento de San Francisco, donde criticaron a Pelosi por permitir la realización de la feria Folsom Street, la cual se lleva a cabo en su distrito. En un comunicado de prensa, el grupo también criticó al evento por mostrar "a hombres caminando las calles vestidos solo con medias y zapatillas" y por permitir la realización de "orgías en la vía pública donde los hombres mantienen sexo entre sí". Los así llamados “norteamericanos por la verdad” incluso arremetieron contra las fuerzas policiales en su comunicado de prensa, asegurando que ellos "se rehusan a hacer cumplir las leyes de decencia en la via pública".
En el comunicado, Peter LaBarbera de Americans for Truth declaró lo siguiente: "En el mismo momento en que nuestra nación enfrenta una severa crisis económica, los Estados Unidos también se encuentran frente a una crisis moral casi tan importante. En nombre de la 'tolerancia y la diversidad,' estamos transgrediendo todos los límites, algunos de los cuales mantenemos desde el comienzo de nuestra historia. En ese sentido, redefinir los términos del matrimonio fuera de su estado natural de hombre-mujer y las perversiones públicas protegidas por la policía como la feria de Folsom, son meros indicadores de una nación en franco declive, una nación que está dejando atrás a Dios".
De acuerdo a una columna de opinión publicada en el San Francisco Weekly, luego de leer este comunicado de prensa, el director ejecutivo de la feria Folsom Street, Demetri Moshoyannis, respiró profundo y dijo: "Dios mio, que ridiculez. Francamente, no tiene sentido relacionar la feria Folsom Street con la Proposition 8. Este no es un evento específicamente gay. Esto puede que sea una novedad para mucha gente, pero al menos un tercio de nuestros asistentes son heterosexuales, muchos de ellos casados".
"Esta gente es muy ignorante, insegura y temerosa", concluyó Moshoyannis.
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