Aprueban ordenanza que permite la Unión Civil en Carlos Paz

El viernes pasado se aprobó la ordenanza que permite la unión civil entre personas del mismo y distinto sexo en el ámbito de esa ciudad. En 10 días a más tardar será reglamentada y calculan que la primer pareja estaría festejando la formalización de su situación de hecho a principios de 2010.

Luego de dos años en stand by, la ciudad de Villa Carlos Paz finalmente se convirtió el viernes pasado en la segunda localidad de Córdoba y del interior del país en permitir la unión civil entre personas del mismo sexo, al sancionar la ordenanza que reglamenta el artículo 55 de la Carta Orgánica Municipal aprobada en noviembre de 2007. En este marco, según informó la titular del Registro Civil local, Mirta Rossi, son tres las parejas interesadas hasta el momento en formalizar su situación de hecho en la Perla de Punilla.

Si bien la medida aún debe reglamentarse para entrar en vigencia, la misma ordenanza prevé su promulgación a partir de los 10 días siguientes a su aprobación, por lo que calculan que la primer pareja homosexual podría estar uniéndose a principios del año próximo.

“Estamos muy contentos porque tres parejas ya fueron a averiguar al Registro Civil, pero en ese momento no estaba aprobada la ordenanza correspondiente. Esperamos que ahora puedan concretar su unión civil en el marco de la aplicación de esta legislación superadora”, dijo Rossi el viernes en la sesión luego de aprobada la normativa.

Sebastián Guruceta (Frente Cívico y Social), explicó que la medida permitirá que tanto heterosexuales como homosexuales obtengan un reconocimiento a su relación en un registro municipal especial. “Esto tiene que quedar bien en claro, porque significa que aquellas parejas que sean heterosexuales, también podrán unirse civilmente para celebrar su situación de hecho sin tener que casarse ni contraer matrimonio”, señaló el constituyente.
Según dijo, se impuso el requisito de que uno de los aspirantes tenga residencia de al menos cinco años en Villa Carlos Paz y que puedan atestiguar al menos dos años de convivencia pacífica entre ellos.

Una vez reglamentada la norma, quienes ingresen al registro podrían visitar a sus parejas dentro de terapia intensiva, pedir una casa en conjunto, tener como bien de familia una propiedad y obtener el reconocimiento para ser beneficiarios en algunos seguros, entre otras cosas.