Tras las leyes aprobadas en el estado de Illinois que permiten a las parejas homosexuales acceder a las adopciones, una organización católica ha preferido dejar sin hogar a decenas de niños y despedir a casi 60 empleados antes que permitir que las parejas homosexuales accedan a sus programas de acogida.Hoy entra en vigor en el estado norteamericano de Illinois una ley que obligará a todas las instituciones que reciben subvenciones públicas a ofrecer el mismo trato a cualquier pareja, sin importar la orientación sexual de la misma.
Dicha ley supondrá que las organizaciones religiosas, que en la actualidad controlan en torno al 20% de las adopciones locales, deberán respetar los derechos humanos de todos los ciudadanos del Estado, permitiendo que las parejas homosexuales también puedan optar a ser padres de niños que carecen de hogar.
Ante la inminente aplicación del proyecto, distintos grupos conservadores presentaron una enmienda para que las organizaciones religiosas pudiesen seguir recibiendo subvenciones públicas a pesar de continuar con una política de incitación al odio. Dicha enmienda no consiguió los suficientes apoyos, siendo rechazada.
El colectivo 'Caridades Católicas de Rockford' ya ha manifestado que dejará de buscar hogar a decenas de niños y despedirá a 58 trabajadores para seguir incumpliendo los derechos humanos de la población homosexual.
Dicha organización recibe en la actualidad 7,5 millones de dólares anuales en subvenciones públicas para su programa de adopciones, administrando hasta el momento, aproximadamente, 350 familias de acogida.
Las administraciones públicas de Illinois han manifestado que la decisión de la organización católica no supondrá ningún problema, puesto que cuentan con los recursos necesarios para hacerse cargo de las adopciones que hasta el momento administraban las Caridades Católicas de Rockford.
Fuente: Universo Gay
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