Álava duplica la cifra de infectados por VIH en un año y registra 39 nuevos casos

El Sida no entiende de sexos ni de edades, aunque sí de dinero y de condiciones culturales. Es una evidencia que el acceso a los métodos de prevención -única vía para evitar la enfermedad- y que la conciencia sobre los efectos letales del mal adquirida a través de la educación no son iguales en todos los países. En occidente no falta información, aunque sí responsabilidad. La falsa sensación de inmunidad ante el virus, la relajación en la adopción de métodos profilácticos en relaciones sexuales y la inconsciencia ante el VIH han convertido las prácticas de riesgo en una ruleta rusa de consecuencias nefastas. Los datos al respecto son alarmantes. El Plan de Prevención y Control del Sida en el País Vasco en 2008 revela que en Álava se ha duplicado la cifra de nuevos infectados por VIH en sólo un año.

En el juego, está el riesgo. Lo que ocurre es que el que pierde con esta infección, no se recupera con un golpe de suerte. Simplemente pasa a engrosar la lista que incluye a las miles de personas afectadas por el VIH -muchas de ellas ya fallecidas-. En ese sentido, los registros señalan que durante 2008 fueron 39 los vecinos de este territorio histórico que contrajeron el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida, responsable del desarrollo de la enfermedad. En concreto, el 19,6% de todos los casos registrados en el conjunto de la CAV.

Las cifras no dejan de ser un frío apunte de una realidad que subraya una evidencia irrefutable. Pese a la formación y a la información y a la facilidad de acceso a métodos preventivos, en Álava se han desbaratado todas las tendencias que avisaban del retroceso de la enfermedad. Ahora, el escenario es otro. Hace apenas un año, esta provincia podía felicitarse de haber reducido un 30% el número de positivos. Entonces, registró 18 nuevos seropositivos por los 46 de Gipuzkoa y 109 de Bizkaia.

En el último año completo -2008-, los territorios vecinos corrigieron su trayectoria y Gipuzkoa sólo registró tres casos más que en 2007, mientras que Bizkaia incluso logró hacer caer dos casos, hasta 109, su registro. Álava ha asistido a un aumento espectacular de los casos, con un salto de 18 a 39 positivos.

Esta circunstancia explica, en gran parte, que el País Vasco haya incrementado la cifra de nuevos infectados llegando a los 199. La mayor cantidad en la última década. Y es que hay que remontarse hasta 1997 para observar unos registros tan elevados. Fue entonces cuando se contabilizaron 229 infectados.

Estos datos preocupan al ámbito asociativo, que invita a una mayor responsabilidad a la hora de tomar medidas preventivas en los contactos sexuales. El caso es que hace tiempo que los colectivos más castigados por el VIH no son drogodependientes por vía parental. El año pasado, sólo un 9% contrajo el virus por esta vía, mientras que el 82,5% de las infecciones llegó por contacto sexual.

Eso sí, las cosas han cambiado en positivo en Euskadi con respecto al año pasado en dos sentidos. En primer lugar, sólo el 20,6% de los diagnósticos del virus coincide con el del sida, por el 30% del año anterior. Es decir, hay más gente que es portadora pero que no ha desarrollado aún la enfermedad. Por otro lado, el colectivo homosexual ha oído la voz de alerta y, a juzgar por las informaciones, ha aumentado la precaución. Y es que mientras que en 2007 el 54% de los infectados fue por contactos sexuales entre hombres, el pasado ejercicio esta cifra se redujo hasta el 43,4%. En féminas, el sexo con varones sigue como la principal causa de transmisión -sucede en más de ocho de cada diez mujeres-. En cuanto a las franjas de edad, la mayoría de los positivos por VIH se da entre los 25 y los 45 años (65,4%). Ahora bien, el 18,6% de los casos se da en personas de entre 40 y 44 años.

También se ha observado un cambio de tendencia en el origen de los extranjeros infectados, que cada año son más (38,7%). A diferencia de estudios anteriores, los subsaharianos encabezan la trágica lista de positivos (46,7%), seguidos de latinoamericanos (33,8%), occidentales (6,5%), eslavos (5,2%) y magrebíes (3,9%).


Fuente: Frecuiencia Gay